La Residencia San Francisco de Asís es un recurso residencial para los menores que entran en el sistema de protección de la Comunidad de Madrid. Como en muchas otras instituciones, ya sean públicas o privadas, cada menor acude con una mochila cargada de problemas, preocupaciones, complejos, miedos, carencias, etc.
Nosotros entre otras muchas cosas, intentamos en la medida de lo posible ir cambiado el contenido de sus mochilas y sustituimos lo que traen de sus casas y lo cambiamos por: autonomía, afecto, cariño, educación, sociabilidad, empatía, asertividad, etc.
Los chicos y chicas abandonan este recurso cuando se solucionan las cosas en su casa o cuando cumplen los 18 años, momento en el que deciden si quieren ingresar en otro recurso, como el del plan de autonomía 18-21 años, regresar a su casa o independizarse. Es curioso pero siempre se dejan un poquito de ellos en esta casa. Desde que se ha creado este recurso hemos custodiado esas pertenencias con cariño, por el significado que sabemos que tiene para cada uno de nuestros chicos y chicas. Un móvil, una vídeo consola, puzzles, un Scalextric, libros, ropa, fotos, peluches, material deportivo, documentación, etc.
¿Qué función cumple ese objeto y objetos? ¿Qué intención tiene el menor o la menor? ¿Cuándo va a venir a buscarlo?
Se nos plantean muchas preguntas, pero lo que está claro es que el olvido de esta pertenencia o la intención de dejarla, cumple una función, una parte de ese niño o niña, se queda en la Residencia Infantil San Francisco de Asís y esto nos reafirma que nuestro trabajo ha sido positivo, productivo y el vínculo afectivo que mantenemos con este chico o chica es tan grande, que nos permitirá hacer un seguimiento de su proyecto de vida, podremos seguir acompañando en la distancia y recibiremos su visita una vez más en nuestra casa, su casa.
David Hermida