En SERCADE entendemos que no hay justicia social sin justicia ecológica.
Por eso, integramos el cuidado del planeta en nuestros proyectos como un eje transversal que conecta la dignidad humana con la sostenibilidad del entorno.
Apostamos por la economía circular, la formación en energías renovables y el consumo responsable como vías reales para la inclusión.
Nuestra empresa de inserción Trébede Social, a través del proyecto Huerto Hermana Tierra, forma y emplea a jóvenes migrantes en agricultura ecológica, fomentando la autosuficiencia y la conexión con la tierra. Además, desarrollamos iniciativas de instalación de placas solares, generando empleo verde en un sector en crecimiento.
Desde una mirada franciscana y capuchina, impulsamos un modelo de desarrollo que respete los límites del planeta y ponga la vida en el centro. Porque cuidar de la tierra es también cuidar de quienes la habitan.